La cerveza es una de las bebidas más populares en el mundo. ¿Sabes cómo se elabora? Cuatro materias primas esenciales son necesarias para lograr ese sabor que tanto nos gusta.
La malta, el agua, el lúpulo y la levadura son los cuatro ingredientes básicos en la fabricación de la cerveza. Cada uno tiene su papel específico, pero se requiere del trabajo en equipo para conseguir el resultado final.
Elemento 1: la malta de cebada, el color de la cerveza
La malta es cereal al sufrir el proceso de malteado que consiste en ponerlos en remojo con el objetivo de que germinen de manera controlada, a continuación se seca y tuesta. A este proceso se le denomina malteado, y se realiza para activar las enzimas que contiene el grano, y así convertir el almidón del mismo en fuente de azúcares disponibles.
Dependiendo del grado de tostado obtenido durante el malteado, se consiguen maltas más o menos oscuras. Además del color, este ingrediente es el principal responsable de los aromas tostados de las cervezas más oscuras.
Elemento 2: el agua, un ingrediente mayoritario
El agua representa entre el 85 y el 95% de la cerveza, es por eso que a lo largo de la historia las cervecerías se construyeron cerca de fuentes de agua de calidad, que como ya explicamos en otro momento, puede influir en el sabor de la cerveza.
Una vez que se ha molido la malta, se mezcla con el agua para preparar el mosto cervecero. Se usan diferentes tiempos y temperaturas, con el objetivo de convertir el almidón en azúcares fermentables.
Elemento 3: el amargor del lúpulo
El lúpulo es el ingrediente de la cerveza que le aporta el amargor característico, estabiliza la espuma e influye en el sabor y aroma. Se trata de una planta resistente que puede sobrevivir a fríos de hasta -30ºC. En septiembre, se recolectan las flores, que son las que se usan para la cerveza. Este ingrediente se añade en la ebullición.
Elemento 4: la levadura, un componente vivo
Una vez filtrado el mosto y tras la ebullición y centrifugado, llega el momento de la magia transformadora. La levadura, un organismo vivo unicelular, es la elegida. Es la encargada de convertir los azúcares del cereal en alcohol y otros subproductos. Este proceso se desarrolla en tanques de fermentación.
Existen diferentes tipos de levadura. El género cervecero es el Saccharomyces, que comprende diferentes especies. Están las Saccharomyces cerevisiae, conocidas como levaduras ale o de fermentación alta y las Saccharomyces pastorianus o Saccharomyces carlsbergensis, o levaduras lager, de fermentación baja.
Estos cuatro ingredientes trabajan siempre en equipo. Con diferentes dosis, tipos y procesos, pero para lograr un mismo objetivo: una rica cerveza.
Para saber más
Os invitamos a usar La Brújula y observar cómo están presentes en cada una de sus cervezas favoritas.